Hagamos buenas “bolas” de silo de hierba

El ensilado en rotopacas es el método de conservación de forrajes que mejor se adapta a determinadas circunstancias: zonas de montaña, fincas muy distantes entre sí o lejos del establo, ganaderías de pequeño tamaño, etc. Por estas razones, es el sistema predominante para ensilar hierba en Asturias.

En nuestras visitas de campo es muy común encontrarse con «bolas» de silo en malas condiciones debido a un manejo deficiente antes, durante y después del encintado. Con el objetivo de evitar estos problemas, vamos a dar las claves para lograr un buen silo de hierba.

Antes del encintado:

Hacer un mantenimiento adecuado de la maquinaria, tanto empacadora como encintadora.

Una vez segado el forraje, hacer un presecado hasta conseguir una materia seca entre el 35% y el 50%.

Hacer rotopacas redondas y firmes, nunca mal prensadas o con forma irregular.

Durante el encintado:

El encintado debe hacerse preferiblemente dentro de las dos horas después de hacer las pacas. Nunca dejar pasar más de 24 horas para evitar fermentaciones indeseables.

Preestiramiento del plástico del 70%:

La manera más fácil de saber si el preestiramiento es el correcto es, al principio del trabajo, medir el ancho del plástico en la cara plana de las pacas:

– Plástico 500 mm: 38-42 cm (óptimo 40 cm)

– Plástico 750 mm: 58-62 cm (óptimo 60 cm)

Solape entre capas del 50%, es decir, cada pasada de plástico recubre la mitad de la vuelta anterior.

Recubrimiento con 6 capas. Para ello se mira el número de vueltas necesarias para cubrir totalmente la paca, se le suma 1 y el resultado se multiplica por 3. De este modo se asegura que haya 6 capas de plástico en toda la bola.

Color del plástico lo más claro posible para evitar el calentamiento excesivo del forraje.

Después del encintado:

Colocar las bolas en posición vertical. Las bases llevan mucha más cantidad de plástico por lo que están más protegidas. Además, el agua de lluvia escurre mejor.

Proteger las pacas de pájaros y otros animales que puedan dañar el plástico utilizando mallas o redes protectoras.

Hacer una revisión periódica de las pacas y reparar los desperfectos que se encuentren.

La importancia de usar un buen plástico

Si se siguen todas las recomendaciones anteriores, únicamente queda un factor a tener en cuenta: EL PLÁSTICO.

La función del plástico es lograr que el forraje se mantenga aislado del aire, del agua y de la luz solar. Y esto se consigue con un plástico de calidad. Y la calidad del plástico depende únicamente de la materia prima utilizada para su fabricación.

El número de capas de un plástico no es indicador de calidad.

Por eso en CAMPOASTUR apostamos por TENOSPIN, un plástico de 3 capas fabricado con material 100% virgen, sin el empleo de plásticos reciclados en su fabricación.

TENOSPIN es un plástico con alta resistencia a la perforación y al estiramiento, una elasticidad perfecta y con un excelente pegamento. TENOSPIN se puede resumir en dos palabras: GARANTÍA Y SEGURIDAD.